Programa Adscrito a la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB)


Hace 30 años un grupo de autoridades locales iberoamericanas dio inicio al desafío de trabajar en la construcción del espacio local de Iberoamérica y de aportar, desde una visión municipalista, sinergias a un mundo que ha de pensar en lo local como motor de muchos de los cambios y mejoras aún pendientes en nuestras sociedades. Personas que trabajan con personas para las personas ha sido nuestro lema en este caminar.

Cuando han pasado más de tres décadas, con orgullo podemos decir que somos una organización fuerte y reconocida, que goza de un importante prestigio, y que compartimos esfuerzos con todos aquellos que están contribuyendo a concebir el desarrollo, el que afecta a las personas, desde el espacio local.

Durante toda nuestra andadura,  y ya es alguna, hemos enfrentado importantes cambios y desafíos a los que hemos sabido resistir y adaptarnos. Y lo seguimos haciendo. En el ADN de nuestra organización se encuentra el cambio, la innovación y la permanente apuesta por lo local. Y es que distintos contextos económicos y políticos nos han obligado a replantear estrategias y a colaborar activamente en una constante evolución del conocimiento que, sin lugar a dudas, ha contribuido a redefinir la forma de entender el desarrollo sostenible y la gestión de nuestras ciudades y territorios.

En estos momentos, y superado el plazo para el cumplimiento de los Objetivos del Milenio enunciados por Naciones Unidas y suscritos por 189 países en el año 2000, y aun con ciertos avances, el análisis actual pone de relieve que las metas no han sido conseguidas y que la situación planteada se mantiene o recrudece en algunos territorios. Este contexto ha llevado a considerar el planteamiento de la Agenda 2030 en donde el desafío es, a la luz de lo avanzado, un enfoque de “políticas integrales” para el desarrollo social, económico y ambientalmente sostenible donde, como señala Naciones Unidas, “nadie se quede atrás”.

Los nuevos Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) dedican, de los 17 enunciados, uno específico al espacio local y proponen como una de las 169 metas “Lograr que las ciudades y los asentamientos humanos sean inclusivos, seguros, resiliente y sostenibles” (ODS 11). Un objetivo trascendental para la agenda de los gobiernos municipales al resaltar la relevancia del espacio local como escenario clave en los procesos de desarrollo. Lejos estábamos en 1990, cuando nació nuestra organización, de que en la agenda política, internacional y regional el espacio local se considera clave para la realización de las políticas que afectan a las personas. A esas personas con las que nos comprometimos al principio de nuestra andadura como institución.

Pero es que, además, los desafíos atinentes a los otros 16 objetivos de la Agenda 2030 se manifiestan y tienen lugar en las ciudades, y es en el espacio local donde los problemas de la humanidad adquieren nombres y rostros. De ahí que sea el espacio local, el espacio de la convivencia, desde donde se tome el pulso a la superación de  problemas inveterados y de carácter universal.

Estos objetivos mantienen a la UIM, desde su inicio en 2015, con un férreo compromiso para colaborar y aportar desde nuestra labor a la construcción de un futuro inclusivo, sostenible y resiliente para las personas y el planeta. Una meta que tiene que reforzarse desde todos los ámbitos y en el que, desde la UIM, estamos convencidos que los espacios locales tienen mucho que aportar…. En eso estamos o, si se prefiere, seguimos ahora trabajando con entusiasmo.

 

Federico A. Castillo Blanco

Secretario General

Unión Iberoamericana de Municipalistas