Jueves, 08 Marzo de 2018
Un día para reivindicar y renovar compromisos por los derechos de las mujeres y la igualdad real
Desde la UIM nos sumamos y apoyamos el llamado de atención que las distintas plataformas feministas hacen al convocar el Paro Internacional de Mujeres, a fin de visibilizar el rol clave de quienes representan la mitad de las poblaciones, tanto en el mercado laboral que mantiene brechas salariales, discriminaciones horizontales y verticales; como en el ámbito privado, donde las mujeres asumen mayoritariamente las tareas de cuidado y responsabilidades domésticas; al tiempo que sufren un continuum de violencias que atenta no sólo contra sus derechos y libertades fundamentales, sino contra sus propias vidas.
El 8 de marzo no es un día de celebración, y por tanto desde la UIM nos posicionamos en reivindicar la necesidad de que los gobiernos municipales, así como todas las actorías presentes en el ámbito local (sector privado, ámbito académico, organizaciones de la sociedad civil, instituciones públicas), asuman compromisos efectivos para luchar contra las desigualdades que siguen oprimiendo a las mujeres y obstaculizando sus oportunidades y desarrollo.
2018 es el año durante el cual desde la UIM trabajaremos más intensamente para renovar nuestro compromiso con la igualdad sustantiva. Si bien será en mayo, en Cuenca-Ecuador donde, con motivo de la IV Cumbre Iberoamericana de Agendas Locales de Género, reflexionaremos amplia y colectivamente sobre los desafíos pendientes para avanzar hacia municipios inclusivos y garantes de la igualdad de género, éste es sólo uno de los hitos que visibiliza nuestra mirada y compromiso. La Red Iberoamericana de Municipios por la Igualdad de Género, la Revista Agendas Locales de Género, cursos de capacitación, los Premios UIM a las Buenas Prácticas Locales con enfoque de género, son también parte de nuestra apuesta por promover ciudades sensibles a las necesidades específicas de las mujeres, ciudades para compartir en igualdad, ciudades conciliadoras, ciudades amables, ciudades seguras para mujeres y niñas…
Pero falta mucho por hacer, y la única manera de avanzar hacia sociedades más igualitarias, es que todos y todas nos comprometamos con la causa a favor de la igualdad. Y los municipios se constituyen en un ámbito natural y de obligada aplicación y ejecución de ese mismo compromiso.